sábado, 15 de noviembre de 2014

El Santuario. Si quieres ver cuevas y pasarlo bien, ve a Calleja.

Cómo mola ver pelis en La 1 de TVE, porque no tienen publi y son en HD. Qué rima tan hermosa ¿verdad? Pues "El Santuario", de la que James Cameron es productor, tiene unas cuantas imágenes de esas que vale la pena ver, una naturaleza exuberante, tanto dentro como fuera de la cueva y, poco más que ofrecer nos trae esta producción sin sustancia y que fue duramente criticada. Yo, como no la había visto me dije, vamos a ver si es tan mala como algunos decían... para mi si.
No soy de los que se fían de eso de "De los productores de" y demás lindezas publicitarias aunque a mi el cine de Cameron me sigue gustando y piensas, bueno si ha puesto pasta ahí igual hay algo que valga la pena; error.
A ver, entendedme, no es que esperara el colmo de la originalidad, que tiene cero, ni una historia metafísica sobre la vida y sus grandezas y miserias mientras la expedición trata de salir de la cueva, pero al menos esperaba entretenimiento y ni eso me dio.
Iniciamos el camino con la presentación de los personajes arquetípicos: ricachón guaperas con novia en consonancia que no solo pagan los gastos sino que son amantes del riesgo; jefe de la expedición al que todo lo que le interesa es ese llegar más allá, cueste lo que cueste; hijo de dicho jefe con conflicto generacional y afectivo con su padre; el resto pues lo típico, comparsas necesarios.
El mayor problema, además del guión, casi inexistente, es el reparto. Nadie que de un poco de personalidad o carisma a esos seres tan planos que desfilan por la pantalla, que consiga que de verdad empatices con ellos ni en los momentos más duros del film, que hay unos pocos, de tal manera que vas pasando de una situación a otra con cara de "pos fale".
Luego está la banda sonora a cargo de  David Hirschfelder tan difícil de apreciar su calidad, por inexistente, como debe de serlo pronunciar su apellido. Tiene un pase en los minutos en que los protagonistas asisten a la visión de los lugares más espectaculares de la cueva el resto del tiempo, es como los actores, sabes que están ahí pero no te importa demasiado.
La trascendencia que quieren buscar con esa especie de poema que comparten padre e hijo, que se convierte en una especie de mantra, es un tanto forzada y ridícula y los giros y el final tan predecibles que ni siquiera en eso se le puede dar la oportunidad de subir un poco la nota.
Visualmente en pantalla grande debía ser impactante en unas cuantas escenas pero mejor verse algún documental o irse con Calleja de desafío por ahí que perder el tiempo con esta floja, muy floja epopeya.
Nota: 3

2 comentarios:

  1. Si una película que tiene detrás a James Cameron no te entretiene nada y te resulta aburrida, es que es mala de verdad porque, se presupone que, al menos espectáculo debería dar.

    Nunca llegó a atraerme mucho, pero tras leer tu opinión, la cuál tengo en alta estima, la descarto del todo.

    @Ociopalabras

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    1. Es que en un reparto con tan poco carisma no hay nadie que salve el pobre, muy pobre, guión. Olvidable.

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